Hipnotizando a mi cachonda madre - Capítulo 82

Después de enviárselas a mi hermana, guau~ mi corazón latía ‘bum-bum~’ ‘dum-dum~’

No podía creerlo.

Hacían casi meses que no intercambiaba mensajes con mi hermana por chat privado, ¡ahora le enviaba fotos de su braga y fotos explícitas de mi madre chupando mi pinga erecta!

¿Qué mensaje debería escribir?, pensé, pero mi cabeza se sintió vacía, como si una ráfaga de viento frío la atravesara, no se me ocurrió nada.

Mamá, sentada a mi lado y concentrada en conducir, ¡seguro no se imagina que yo haría algo así!

Aún quedaba un ‘1’ en el contador de mensajes, así que dudé si borrarlo o no, ¡en un instante el número desapareció!

¡Rayos! ¡Por fin mi hermana verá mi foto!

A esta hora seguro está en casa, ¿me responderá?

¿Me contestará con un ‘¡Maldito loco! ¿Qué diablos estás haciendo?’ lleno de insultos?

¡No! Con el ambiente que hay ahora, es seguro que mi hermana no se va a enojar tanto conmigo.

¡Seguro fingirá no saber nada, que no vio nada!

Y eso es lo que yo quiero…

Seguí revisando mi celular, temblando de nerviosismo, ‘brrr~’, hasta que llegamos al estacionamiento del apartamento.

Quería seguir disfrutando y consintiendo a mamá, pero ahora mismo estoy más preocupado por mi hermana.

Lo primero que quiero es entrar rápido a casa y ver si mi hermana llegó y cuál será su reacción.

Mamá, mirándome de reojo, apagó el motor y abrió la puerta del auto.

Seguro pensó que yo haría algo raro, pero como me quedé quieto, tiene una expresión de sorpresa.

Con el corazón latiéndome fuerte, abrí la puerta del apartamento y vi los zapatos que mi hermana usa en casa en la entrada.

¡Estaba en casa!

Entré a la sala con mamá, pero la puerta de la habitación de mi hermana seguía firmemente cerrada.

—Parece que Mi-hye ya está durmiendo.

Mamá, sin saber nada, miró de reojo hacia la habitación de mi hermana y luego entró rápidamente a su cuarto.

Verla actuar así de evasiva me dio rabia sin razón.

Rápidamente seguí a mamá y entré también a su habitación.

Mamá se giró y, como si estuviéramos peleando, me empujó en el pecho mientras murmuraba que me fuera.

—¡¿Cómo se te ocurre entrar hasta aquí?! ¡Está en su habitación!

—¡Está durmiendo, qué!

—Ahora no es hora de dormir… ¡Sal rápido!

—¡Está bien, ya me voy! ¡Solo un besito de buenas noches!

—¡Ay, qué cosas dices! ¡No quiero!

Mamá frunció el ceño de nuevo.

Como no tiene ni idea de que le envié una foto de su… a mi hermana, ¡cuánto le debe preocupar solo la presencia de mi hermana!

Pero yo ya le envié a mi hermana una foto que no debió ver, ella incluso la vio, ¡así que qué importa esto!

Pensándolo bien, me alegro de haber enviado esa foto mientras mi corazón latía ‘tum-tum~’.

No tengo por qué tener miedo de que mi hermana me descubra, o más bien, siento una extraña necesidad de que mi hermana vea estas cosas.

¡Una perversa necesidad de que se excite más si lo ve a escondidas!

Pero por el bien de mamá, cerré la puerta y, con decisión, bajé la cremallera de mis pantalones, sacando mi miembro erecto con dificultad, ‘a duras penas~’.

‘Uf~ ¡Soy un hijo que se baja el pantalón y saca su pinga frente a su madre!’

¿Cómo llegué a esto?

¡Lo siento mucho por mamá!

¡Pero tengo que acostumbrarla!

—¡Qué estás haciendo!

Mamá me golpeó el pecho con el puño, ‘pon pon!’.

—¡Un beso de buenas noches! En mi……

Mamá está horrorizada.

—¡No me iré si no me das un beso en mi pinga!

—¡Ay, este malvado! ¡De verdad que no puedo más contigo!

Mamá, asustada de que mi hermana en casa pudiera oírnos, a regañadientes se arrodilló y, agarrando mi pinga que sobresalía torpemente de mi ropa interior, acercó sus labios a mi glande.»

—¿Ya está? ¡Sal rápido!

—¡Qué es eso! ¡Sin ganas! ¡Chúpamelo bien una vez y di: ‘Hijito, que descanses bien esta noche y mañana te daré un beso por la mañana’! ¡Estuve extrañando a mamá todo el día, al menos debes consolarme con la boca!

—¡Ay, de verdad que no tienes remedio!

Mamá abrió bien la boca y metió como un ‘¡swoosh!~’ un tercio de mi verga, pasando el glande, luego enrolló su lengua húmeda con un ‘¡whirly-lick!~’ y lo succionó con un ‘¡chuick♡!~’.

—¡Eugh!~

Una sensación tan intensa que sentí que mi cintura se encogía me invadió, sin darme cuenta eché las caderas hacia atrás y dejé escapar un gemido.

—¿Ya está?

—¡También tienes que despedirte! ¡Di: ‘Pinga de mi hijo, que descanses bien hoy y mañana te besaré de nuevo por la mañana’! ¡Así!

—Hijito~ que descanses bien hoy y mañana te daré otro beso♡~…

—¡¿Por qué te saltas lo de ‘pinga de mi hijo’?!

—¡Se oye todo desde afuera!~

—Como me lo chupaste mucho antes, ¡te lo perdonaré solo por hoy! ¡Espero lo de mañana por la mañana! ¡Buenas noches, mamá!

—¡Contigo no creo que pueda tener buenas noches!

Mamá volvió a fruncir el ceño, mostrando su orgullo.

—¡De verdad!

Como si la estuviera castigando, extendí mi mano izquierda hacia abajo y agarré su abultado pecho, amasándolo a mi antojo.

—¡Ay~ de verdad!

Mamá, con su orgullo herido, hizo una cara de mucho disgusto y me agarró la muñeca.

La sujeté de la cabeza con mi mano derecha para que no pudiera moverse y seguí amasando sus pechos.

Aunque estaban cubiertos por su blusa y sostén, con la obstinada intención de encontrar y agarrar sus ♥pezones♥, mis dedos pulgar e índice buscaban su rastro, apretando el centro del montículo…

—¡Ahyuuung♡♥~hmm… hmmmzua♡~!

La voz de mamá se volvió ligeramente lánguida y se quebró un poco.

‘¡Zorra astuta!’

¡Como esperaba, al amasarle los pechos sin dudarlo, la señal llegó de inmediato!

¡Cuando es así, parece tener un lado masoquista muy marcado!

Miré con atención y su cuello ya estaba completamente rojo.

Dejé de amasar sus pechos y le acaricié la mejilla, ¡tan ‘caliente-caliente~’ y ‘tibio-tibio~’ como esperaba!

‘¡Perra! ¿Ya se está calentando de nuevo? ¡Como la agarré del pelo y la inmovilicé, enseguida se acobardó y su cuerpo parece estar ‘ardiente-ardiente~’ y cachonda!’

Me incliné y empecé a desabrochar los botones de su blusa.

Mamá extendió la mano de nuevo y me agarró la muñeca, empezando a resistirse con un ‘¡hmmph!~’.

Pensé en arrancarle todos los botones, pero me contuve y los desabroché uno por uno. Mamá seguía agarrándome la muñeca, tratando de impedirlo.

Agarré el borde de la blusa y la levanté con un ‘¡zas!’. El borde que estaba metido dentro de la falda se desplegó con un suave aleteo, saliendo hacia afuera.

Ahora su pecho estaba completamente descubierto, como si solo llevara la blusa arrugada sobre su cuerpo desnudo con sostén.

Uf~

¡Ver el ♥escote♥ de mamá y la piel blanca de sus hombros me vuelve aún más loco!

Pasé mi brazo por detrás de su espalda mientras estaba inclinada y lo metí dentro de la blusa, agarrando rápidamente el broche del sostén.

¡Casi con la intención de arrancarlo!

¡Me siento completamente fuera de mí!

Mi pinga, completamente rígida por la excitación, presionó la mejilla de mamá♡~ mientras le quitaba el sostén.

No recuerdo cómo lo hice.

Al final, le quité el sostén que colgaba de ambos brazos, pasando por delante de ella.

Con las rodillas flexionadas, restregué mi verga contra la mejilla de mamá una y otra vez.

¡De izquierda a derecha y luego de nuevo a la izquierda!

Su suave mejilla, presionada por mi pinga, se deformaba mientras se movía de un lado a otro.

Ver esa imagen me excita y me estimula aún más.

¡Estoy restregando mi pinga contra la cara tan bonita de mi mamá!

¡De verdad que estoy loco! ¡Mi pinga en la cara de mamá!

¡Qué demonios!

¡Arrojé el sostén que había quitado sobre la cama con un ‘¡fuish!’!»