Felizmente Psicótica - Merry Psycho - Capítulo 151

Cada paso que daba hacia él traía consigo una avalancha de años difíciles, como escalar una cresta montañosa. Joo Seol-heon apenas logró mantener la compostura en su rostro a punto de derrumbarse.

¿Adónde se había ido el cabello rizado que le había regañado para que se cortara? Ahora solo sobresalía una clavícula delgada y huesuda.

El hombre seguía con el rostro envejecido y hundido, cargando con el dolor.

Después de lo que pareció una eternidad, un par de ojos se encontraron con los suyos, a través de un hueco.

—….¡

―….!

Rigai había levantado la cabeza y la miraba fijamente, como aturdido. Joo Seol-heon contuvo a la fuerza un gemido que brotaba de su garganta.

—¿Por qué…?

Después de regresar a Corea tras la operación, ella no había vuelto a mirar atrás a lo que había dejado.

Bajo la estricta vigilancia del gobierno ruso, se prohibieron las visitas a Rigai, quien quedó completamente aislado, y los rumores que circulaban en secreto se detuvieron abruptamente en algún momento.

Sin embargo, más de una década después, recibió información de inteligencia: él estaba a punto de ser liberado. Era una noticia impactante: en el lugar disfrazado de prisión, en realidad, se había continuado la investigación cerebral.

Joo Seol-heon se agitó a partir de ese momento. Si Rusia había orquestado su liberación, rastrearían meticulosamente a los niños supervivientes de Sajalín. Si eso sucedía, la existencia de Sonya también…

Tenía que prepararse lo antes posible.

Así nació la Operación Bird Box. La esencia era «eliminar en secreto a todas las fuerzas que se acercaran al ‘Búho’ y proteger a la hija de su padre», pero el verdadero objetivo de Joo Seol-heon era matar a Rigai, quien se había acercado a su hija.

Pero si era verdad que se había vuelto loco, si su brillante mente realmente se había deteriorado, ¿en qué punto del pasado estaba atrapado?

¿Antes de conocerla, o después? Si su mente se había fragmentado, menos aún podía confiar en él.

Si solo quedaban los fanáticos de Sajalín…

—Rigai…….

Joo Seol-heon se acercó más a él, llevándose la mano a la cintura. Durante la Operación Velo Rojo, un momento de vacilación le impidió completarlo…

La orden de matar a Rigai Viktor.

Ese era el único error que había cometido la agente «Zoya» y el punto final que ahora debía poner. Le puso la boca fría de la pistola en la frente a Rigai.

—Pelo negro… Zoya…

Una sonrisa se extendió lentamente por su rostro desfigurado por las cicatrices. Joo Seol-heon apretó con ambas manos el arma temblorosa. ¿Cómo había llegado a tener una apariencia tan horrible?

Aun así, había llegado hasta aquí para ver ese rostro.

—Tus ojos… ¿Dónde están tus ojos, Rigai?

—…….

—Tú… ¿Por qué no tienes ojos…?

Sus manos temblaban incontrolablemente. ¿Por qué se habían ido sus ojos inteligentes de antes?

—¡¿Qué demonios te hicieron?!

—¡No me pegues, papá! ¡Lo siento, no quiero estar en aislamiento…! ¡Aaah! ¡Dios establecerá un reino que nunca será destruido, Sajalín es la tierra prometida y la gran ciudad invernal destruirá a todas las naciones! ¡La señal de poner a todas las bestias bajo mis pies es mi misión, puedo hacerlo, puedo crearlo!

Rigai se cubrió la cabeza y comenzó a suplicar a borbotones. Joo Seol-heon bajó la pistola y echó la cabeza hacia atrás, como si se derrumbara. Este hombre cobarde. Un padre fallido. Un salvador débil. Aun así…

—…Rigai, cumpliste tu promesa.

Cuando uno crece con padres que solo tienen hijos sin un sustento digno, llega un momento en que parecen bestias. El apareamiento es breve, pero la responsabilidad es larga, sus padres eran seres patéticos que daban a luz y luego se desentendían.

Constantemente me tropezaba con mis hermanos menores, quienes lloraban a gritos. No podía con tantas bocas que alimentar, así que varias veces al día me planteaba a quién debería abandonar y, al final, decidí abandonarlos a todos.

Dejando atrás lo que la ataba, Joo Seol-heon se metió en una fábrica de costura desde la mitad de su adolescencia, viviendo encorvada. Afortunadamente, era muy inteligente, tenía un rostro hermoso y una tozudez tan terrible que hasta un fantasma se rendiría ante ella.

Gracias a que no dejó de estudiar mientras trabajaba en la fábrica, tan pronto como cumplió veinte años ascendió a un puesto de funcionaria subalterna. Por recomendación de su superior, quien la observaba con atención, no recibió formación para un puesto de oficina, sino para otro tipo de trabajo. No tenía ningún talento para las labores físicas y no destacó en ellas, pero la oportunidad llegó por esa época.

「En Corea del Norte, señor, las agentes femeninas llevan a cabo una operación llamada «Siembra de Semillas». ¿Ha oído hablar de ella?」

La CIA estadounidense había solicitado la colaboración del Servicio de Inteligencia. Damon, un agente de la CIA, buscaba a una agente coreana de apariencia delicada.

Sin embargo, más importante que el aspecto físico, enfatizó fuertemente la condición de la crueldad.

「El Departamento de Operaciones del Partido de los Trabajadores envía a agentes femeninas al extranjero para obtener una variedad de rostros según la raza: caucásicos, negros, árabes, del sudeste asiático. La Oficina de Enlace 915 se encarga de su gestión y les facilita la vida mientras crían a los niños como agentes. Su apariencia innata reduce las barreras culturales, ¡qué talentos tan útiles son!」

「¿A dónde quiere llegar?」

「¿Hasta dónde puede llegar la señorita Joo?」

「……」

「Asumamos que tiene un hijo de alguien a quien no ama.」

「Aquí no es Corea del Norte.」

「Porque el lugar al que debe ir Señorita Joo es Rusia.」

«Así que no es tan fácil», añadió Damon a la ligera, antes de llevarse a la boca un sujeonggwa y dejarlo con una mueca de desagrado.

Asure: 수정과 : sujeonggwa es un ponche de canela tradicional coreano. De color marrón rojizo oscuro, se elabora principalmente con canela, azúcar, agua y jengibre. Se suele servir con gotgam (caqui seco) y adornado con piñones.

Joo Seol-heon recordó la casa que había abandonado. Sus padres, que daban a luz como si comieran. Esas existencias fastidiosas, solo por la cantidad de cabezas. ¿Qué tiene de tan noble parir un hijo?

「Aun así, me gustaría tener sexo con un humano que tenga todos sus miembros…」

Ese día, ella recibió un nuevo nombre.

「¡Zoya…!」

Cabello desordenado y enmarañado, y unas gafas de alta graduación que hacían sus ojos parecer agujeros de hormiga. ¿Cómo podía ese hombre tan desaliñado ser una figura peligrosa que había perturbado la seguridad de Estados Unidos con un solo artículo?

Todavía no podía creerlo. Era un excéntrico obsesionado con la investigación, y su habilidad social era lamentable.

A pesar de eso, su nivel de alerta era tan alto que se sobresaltaba con el sonido de un paso y vivía con un colapso nervioso constante.

Incluso tartamudeaba extremadamente cuando se ponía nervioso, echando a perder todo el “parto” si intentaba tocarle el pene.

「O-o-hoy es tu día de ovulación, Zoya, así que n-no, no podemos.」

「¿Qué importa eso?」

「¡E-esto es por nosotros… A-a-aa, no, no muerdas, suéltame, Zoya!」

El artículo que ese hombre había publicado era una transgresión en sí misma. Causó una gran conmoción al presentar una teoría que complementaba el proyecto de lavado de cerebro MK, en el que incluso la poderosa Estados Unidos había fracasado.

Fue más allá, afirmando que si se reciclaba el cerebro, sería posible un lavado de cerebro perfecto. Hacia el final de la Guerra Fría, la investigación de Rigai surgió como una nueva arma.

Era una tecnología que cambiaría el curso de la guerra.

Pero como ocurre con toda tecnología armamentística, si no la podía tener, debía destruirla.

Estados Unidos quería reclutar a Rigai a toda costa, pero su personalidad desconfiada que dificultaba el acercamiento, sumado a que era un coreano de segunda generación y que estaba inmerso en una religión heterodoxa, era un problema que le causaba dolores de cabeza. En esas circunstancias, Zoya fue infiltrada y comenzó a monitorear cada movimiento de Rigai.

Como resultado, la táctica de la belleza funcionó. Se burlaba por lo bajo cada vez que se encontraba con su rostro aturdido y perdido, mirándola fijamente.

Si esta misión salía bien y regresaba, solo le esperaría el éxito. Tal vez incluso podría convertirse en ejecutiva a la edad más joven. Joo Seol-heon había sido prometida con el respaldo ilimitado de la CIA a cambio de llevar a cabo la misión ultrasecreta.

Tenía que convertirse en su esposa a toda costa.

「Un momento. ¿Q-qué, es… soltero?」

「Sí, sí. Lo siento.」

「¡Debió decirme eso antes de acostarse conmigo…!」

「Y-yo le dije claramente. No tengo ninguna, ninguna intención de conocer mujeres…」

「¡En el mundo, ¿Dónde existe un ladrón como este?!」

Pero ese camino era largo y arduo. Aunque al final logró convertirse en su amante tras muchas vicisitudes, el hombre, una vez terminado el acto sexual, siempre se arrodillaba como un pecador y se sumía en la oración.

¿Debería considerarlo una suerte que no rezara mientras se movía? Era tan inverosímil que incluso le causaba una sensación de extrañeza. Tal como indicaba el informe de la CIA, Rigai era un hombre devoto que seguía las doctrinas y normas de Sajalín.

La primera prioridad de ese hombre no era ella. No era a ella a quien se aferraba con fervor y le revelaba todos sus secretos. ¿Cómo podría ganarle a su dios…? ¿Con qué, diablos…?

Sentía una privación ante ese muro inquebrantable e inalcanzable. ¡Ese hombre rústico y aburrido…! Nadie en su sano juicio te miraría si no fuera por mí…

Hubiera sido aún mejor si no hubiera sabido que detrás de esas gruesas gafas se escondían unos ojos agudos y brillantes.

Incluso después de casarse, la peculiar cautela de Rigai persistía. A pesar de ser su única esposa, la boca de Rigai era impenetrable.

Discretamente intentó hablar sobre la inmigración, pero no obtuvo ni una pizca de interés. No pudo averiguar nada sobre su investigación, sobre sus padres, ni sobre el monasterio donde había nacido y crecido.

Nunca le presentó a ninguno de sus amigos y tampoco pudo ir a Sajalín. Era una mujer sana en edad fértil, pero la edad se le venía encima. Cada vez que iba al punto de contacto para reportar, sentía vergüenza.

「Hemos recibido información de inteligencia de que la Iglesia Ortodoxa Rusa ha aumentado su influencia al aliarse con la KGB. Para ser exactos, se trata del Monasterio de Sajalín, clasificado como herético, y es el lugar donde creció Rigai Viktor. ¿Ha oído algo al respecto?」

「N-no…」

「Si él tiene la más mínima conexión con la KGB, eliminaremos a Rigai antes de que su investigación sea completada.」

「……！」

「Zoya, ¿cómo va el embarazo?」

La mirada de Damon se posó en su vientre plano. El tiempo que pasaba sin resultados la estaba volviendo loca. El momento en que podría regresar a Corea se estaba extendiendo mucho más de lo esperado.

「Si ni siquiera ha visitado la ciudad natal de su esposo, significa que aún no ha accedido al núcleo de Rigai.」

「……！」

「Es un lugar muy exclusivo. Dicen que no aceptan a nadie que no sea un coreano Koryo que cultive la tierra de Sajalín y viva de ella. Solo los hijos de coreanos Koryo pueden entrar allí.」

「……」

「Zoya, ¿cuánto tiempo más va a estar pudriéndose en Rusia?」

Apretó la mandíbula con humillación.

「Si es difícil cambiar el pensamiento de Rigai, ¿no es tu deber, Zoya, crear una nueva debilidad?」

Los días después de ir al punto de contacto su ánimo decaía aún más. Sin embargo, al quitarle las gafas tontas a su esposo y ver sus ojos largos y bien abiertos, sentía que todo saldría bien.

Sí, este es el hombre que yo hice. No hay lugar en él, de la cabeza a los pies, que mis manos no hayan tocado. Joo Seol-heon se llevó la mano al bajo vientre.

「… ¿Qué? ¿Un hijo? Zoya, ¿acabas de decir nuestro hijo?」

「¿Por qué pone esa cara…?」

「¡A-a-aa… No. No… ¡No, no debe haber un hijo! ¡No! ¡No!」

Su esposo, que rara vez alzaba la voz, gritó como si estuviera enloqueciendo. Ella se quedó helada al verlo caer y sentarse en el suelo, golpeando el piso y llorando. El esposo, que rechazaba al niño con todo su cuerpo, se desmayó.

A partir de ahí, todo comenzó a desmoronarse.